El sector salud de Tlaxcala ha intensificado la vigilancia epidemiológica para prevenir cualquier incidencia relacionada con la bacteria Klebsiella oxytoca, que recientemente causó infecciones graves en varias unidades médicas del Estado de México. Por ello, las autoridades locales han reforzado las medidas de supervisión en insumos médicos para garantizar la seguridad de la población.
Por su parte, Rigoberto Zamudio Meneses, titular de la Secretaría de Salud de Tlaxcala (Sesa), informó que el estado no utiliza el Centro de Mezclas de Toluca, lugar donde se originó el brote, sino el ubicado en la Ciudad de México, lo que reduce significativamente el riesgo de exposición. No obstante, destacó que se mantiene una estricta vigilancia en el manejo y uso de soluciones médicas.
Aunque Tlaxcala se encuentra fuera del área de mayor riesgo, Zamudio Meneses subrayó que la alerta sanitaria es de carácter nacional, por lo que el estado ha implementado protocolos adicionales para monitorear los cultivos de nutriciones parenterales y otros insumos relacionados. A la fecha, el brote en el Estado de México ha resultado en la muerte de al menos 13 recién nacidos, según la Secretaría de Salud federal (SSa).
En respuesta, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) suspendió las operaciones de la empresa SAFE, señalada como responsable de distribuir soluciones contaminadas de nutrición parenteral total (NPT).
La bacteria Klebsiella oxytoca, responsable del brote, es conocida por su alta resistencia a los antibióticos, lo que complica su tratamiento y la convierte en una amenaza significativa para la salud pública. Este hecho ha llevado a las autoridades en Tlaxcala a mantener monitoreos constantes, y a reforzar la coordinación con el gobierno federal para contener su impacto y evitar su propagación a otros estados.