Es resultado del modelo mexicano de innovación soberana para el bienestar impulsado por Conahcyt; coordinó el proyecto desarrollado en colaboración con sector privado
Como parte de los esfuerzos del Gobierno de México para impulsar el aprovechamiento soberano del litio en el marco del Plan Sonora en energías sostenibles, se realizó la presentación pública de Taruk, primer autobús eléctrico mexicano, en el Palacio de Minería y las calles de la Ciudad de México; este desarrollo soberano sienta las bases para una industria del transporte público eléctrico en el país en beneficio de la nación.
En articulación con el gobierno, academia, industria, sociedad y con una visión ambiental, Taruk es resultado del modelo mexicano de innovación soberana para el bienestar impulsado por el Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (Conahcyt), que pone los esfuerzos de ciencia, tecnología e innovación al servicio de retos estratégicos para el país, como el relacionado al transporte público.
En México, el sector de transporte consume 43 por ciento de toda la energía utilizada en el país; la mayoría, proveniente de fuentes fósiles; dicho consumo está en aumento debido al crecimiento anual de seis por ciento en el número de automóviles, cifra que supera la tasa de crecimiento poblacional y económico, con todas las repercusiones ambientales, sociales y de salud que conlleva.
Ante esta problemática, si México aspira a una soberanía energética, se debe priorizar el transporte público eléctrico, y crecer en capacidad de generación de energía con fuentes renovables para apoyar sectores estratégicos como la movilidad.
Taruk simboliza un avance estratégico en la cadena productiva de la industria del litio, específicamente en su aplicación para baterías destinadas a la electromovilidad del transporte público.
Durante el acto protocolario, la directora general del Conahcyt, María Elena Álvarez-Buylla Roces, expresó que Taruk representa la consolidación de grandes esfuerzos, fruto del talento de ingenieras e ingenieros mexicanos y en respuesta a empresas apasionadas, comprometidas con el bienestar colectivo y con el porvenir de generaciones.
“Confiar en el talento mexicano. Estos logros no se pueden sin la colaboración de todos los sectores, especialmente quienes se guían del bienestar general. [ ] Sin eso, no tendríamos todos esos resultados, que, además, son el inicio para potenciar a México a la vanguardia en investigaciones, desarrollos tecnológicos e innovaciones soberanas”.
Añadió que Taruk es muestra de que la suma de voluntades entre el sector público y un sector privado comprometido con el bienestar social y ambiental genera grandes impactos a la nación, garantizando la capacidad de producción interna, con precios competitivos frente a opciones extranjeras; una suma de voluntades que produce tecnología y grandes innovaciones que, además, son capaces de potenciar un retorno al Estado para financiar más investigaciones a futuro.
La directora adjunta de Desarrollo Tecnológico, Vinculación e Innovación del Conahcyt, Delia Aideé Orozco Hernández, explicó que el autobús mexicano se diseñó con apoyo de dos empresas mexicanas de base tecnológica, Megaflux y Grupo DINA, en colaboración con el Centro de Tecnología Avanzada (Ciateq), un Centro Público coordinado por Conahcyt, el Instituto de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y la Universidad Autónoma Metropolitana unidad Iztapalapa (UAM-I).
“Este primer autobús eléctrico es un orgullo para México, porque es resultado de la colaboración entre empresas mexicanas, instituciones de educación superior y Conahcyt. Es un ejemplo de lo que podemos lograr cuando unimos fuerzas y talentos. Esperamos que Taruk sea la base de una nueva era de transporte público y sustentable en nuestro país”.
El director corporativo de Operaciones de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Carlos Andrés Morales Mar, reafirmó el compromiso de dicha institución por acompañar la transición energética justa y sostenible “que incluya la electromovilidad, para que podamos tener un futuro donde el servicio eléctrico sea para todos los mexicanos y estén al alcance de colocar desarrollos tecnológicos”.
El director general y cofundador de MF Vehículos Eléctricos, SA de CV, Roberto Gottfried Blackmore, llamó a las empresas nacionales a trabajar por el bienestar social y un ambiente sano. “Pensamos que el camino hacia adelante es la soberanía tecnológica. Hay que desarrollar soluciones desde México, para México”.
El futuro secretario de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación de la Ciudad de México, Pablo Enrique Yanes Rizo, resaltó la importancia de trabajar en colaboración, pues “revela la capacidad de sumar esfuerzos, de construir sinergias con resultados muy relevantes”.
Añadió que “el desarrollo tecnológico implica fomentar capacidades endógenas. En la medida que tengamos mayor nivel de autosuficiencia, tendremos también una soberanía sólida donde los beneficios tecnológicos se conviertan en beneficios sociales, con más inserción en la economía mundial”.
Finalmente, el investigador del Instituto de Ingeniería de la UNAM, Germán Carmona Paredes, habló de la importancia de vincular la industria, la academia, el sector privado y el gobierno para lograr proyectos como Taruk, que demuestren que “México cuenta con la capacidad y credibilidad en el desarrollo de la ingeniería nacional”.
En tiempo récord y con todas las pruebas de funcionamiento realizadas de manera satisfactoria, el primer autobús eléctrico mexicano es una realidad gracias a la alianza entre Conahcyt, el sector privado y el gobierno, llevando la ciencia aplicada e innovación al tema de movilidad.
Taruk —que en lengua yaqui significa “correcaminos”— es una alternativa para reducir el uso de vehículos particulares, disminuir costos, congestionamiento y promueve una movilidad urbana inclusiva; además, sienta las bases para una industria de transporte eléctrico con beneficios ambientales y de salud.
Próximamente, la Ciudad de México realizará pruebas del autobús eléctrico Taruk en la Ruta 46 de la Red de Transporte de Pasajeros (RTP) de la Ciudad de México, que recorre 22 kilómetros con 39 paradas pasando por tres alcaldías: Iztacalco, Iztapalapa y Tláhuac. Durante las pruebas se evaluará el desempeño del autobús, con la intención de planificar una correcta estrategia de electromovilidad.
El primer autobús eléctrico mexicano, Taruk, estará disponible para pruebas en otras ciudades de México, marcando el inicio de una nueva industria nacional de electromovilidad, un motivo de orgullo para todas y todos los mexicanos. Este desarrollo es ejemplo del alcance de las ciencias, humanidades, sociedad, gobierno, industria y el cuidado ambiental, para innovar en favor del bienestar social y el ambiente.