Alejandro Martí, empresario, filántropo y fundador de la organización México SOS, murió a los 73 años de edad.
Martí, dueño de las empresas de artículos deportivos Martí, cobró relevancia en el ámbito nacional después de que su hijo Fernando fuera secuestrado y asesinado.
Fue en junio de 2008 cuando Fernando, de 14 años de edad, fue secuestrado mientras se dirigía a la secundaria. Al cabo de 53 días fue hallado muerto al interior de la cajuela de un auto abandonado en Coyoacán.
Dos años después, en 2010, fue detenido ‘El Frank‘, uno de los involucrados en el caso, quien de acuerdo con investigaciones se encargó de ubicar el domicilio de Fernando Martí, vigilar su rutina diaria e informar la ruta seguida por su chofer hacia su escuela.
Tras la muerte de su hijo, Martí aseguró que dedicaría el resto de su vida a luchar por un México más seguro por lo que parte de su atención se desplazó al Sistema de Observación para la Seguridad Ciudadana (SOS).
Desde ese momento, Martí se convirtió en un referente del activismo en México y una figura que, constantemente cuestionó el actuar de las autoridades responsables de la seguridad en el país.
En agosto de 2008, Martí se abrió paso entre los temas nacionales al pronunciar su frase “Si no pueden, renuncien“, al presidente así como integrantes del Gabinete Federal, goibernadores y jefe de Gobierno de la Ciudad de México quienes se encontraban reunidos en el Consejo de Seguridad Nacional.