EFE.- El Tribunal de Apelaciones de Delitos Penales de Texas frenó este lunes la ejecución de la madre mexicana acusada de matar a su hija de dos años, Melissa Lucio, que estaba programada para este miércoles, y ordenó al Congreso del estado que examine su posible inocencia.
En concreto, la corte destaca el hecho de que varios miembros del jurado que condenaron a Lucio en 2008 han afirmado públicamente que de haber conocido todas las pruebas que había sobre el caso, no habrían optado por la pena de muerte.
Además, apunta a varias pruebas científicas que han salido a la luz, y el hecho de que la Fiscalía ocultó pruebas que habrían resultado favorables a Lucio.
La ejecución de esta madre de 53 años queda por lo tanto suspendida hasta que el Congreso de Texas analice estos argumentos y llegue a una conclusión.
Los representantes legales de Lucio habían presentado varias apelaciones ante los juzgados, además de una petición de indulto, para la que estaba previsto que se pronunciara hoy la Junta de Indultos y Libertad Condicional de Texas.
Casi la mitad de los miembros del jurado del juicio ha afirmado públicamente que se arrepienten de haberla condenado a la pena capital, y que de saber algunas de las pruebas que ha presentado recientemente su equipo legal, su decisión habría sido distinta.
Embajada de México en EU celebra suspensión
El embajador de México en Estados Unidos, Esteban Moctezuma Barragán, celebró la decisión de la Corte de Apelaciones Federales de Texas para suspender la ejecución de la mexicana Melissa Elizabeth Lucio.
El embajador informó el sábado que había solicitado clemencia para Melissa Elizabeth Lucio, a través de una carta a Gregg Abbott, gobernador del estado.
Melissa Lucio se convirtió en 2008 en la primera latina condenada a muerte en 2008 por supuestamente haber matado a su hija de 2 años de una paliza, aunque ella alega que fue un accidente porque la niña se cayó por unas empinadas escaleras.