La joven Vanessa, de 24 años, desapareció en agosto de año 2017 en la colonia Loma Linda en la terminal del 52 B el municipio de Guadalajara. Junto a ella estaban los restos de otras 3 personas
El calvario y el sufrimiento culminaron para Araceli Hernández, quien buscaba a su hija desaparecida desde hace más de 4 años.
La joven Vanessa, de 24 años, desapareció en agosto de 2017 en la colonia Loma Linda, en la terminal del 52 B, en el municipio de Guadalajara.
Este viernes 26 de noviembre la localizó al interior de una fosa clandestina ubicada en una vivienda en obra gris en el municipio de San Pedro Tlaquepaque, en la colonia Francisco I. Madero, en el cruce de las calles Manuel Alberti y Adolfo Ruíz Cortines.
Araceli aseguró que presume que se trata del cuerpo de su hija debido a la ropa que traía puesta el último día que la vio y que fue privada de su libertad.
Aquel día de agosto la joven Vanessa traía short falda y tacones, además del cabello rubio. La joven Vanessa dejó huérfanos a dos hijos, los cuales se encuentran con su padre.
Añadido a esto, también se logró localizar los cuerpos de otras tres personas dando el total de dos hombres y dos mujeres sin vida enterrados.
“Encontraron a cuatro personas, una de ellas es mi hija, por eso es que me mandaron llamar. Son dos muchachitas y dos hombres, hay más cuerpos todavía, se va a trabajar el lunes porque la Fiscalía vino y soltó a sus canes y, efectivamente, hay muchos más cuerpos aquí”, dijo Araceli Hernández, madre de Vanessa.
La señora Lupita Aguilar se comunicó con Araceli para que fuera a la fosa donde se logró localizar el cuerpo de Vanessa. Araceli mencionó que su hijo Manuel también desapareció el mismo mes de agosto, 4 días después el mismo año, en la esquina de la calle Cuyucuata y 8 de Julio en una gasolinera. Los trabajos en la fosa continuarán el lunes, y se espera que se encuentre también el cuerpo de su otro hijo desaparecido.