Hugo, originario de Pahuatlán, un municipio ubicado en la sierra norte de Puebla, arriba diariamente a la capital tlaxcalteca para vender sus chile morita y su café, cosechado y tostado de manera artesanal.
Acompañado de su familia, Hugo de 42 años, comentó que la venta de sus productos han disminuido desde que inició la pandemia, empero, afortunadamente como se ha reactivado la movilidad y más en la zona centro han incrementado sus ventas.
"Algunas personas ya me tienen ubicado por mi café el cuál dicen que es muy sabroso, la forma de tostar es diferente, hay otros que están muy morenitos y a la gente le gusta más canelita".
Desde aproximadamente 10 años, vende en varios puntos de la capital, por lo regular se le puede encontrar frente a Palacio de Gobierno, llegando desde las 12:00 del día y retirándose a las 18:00 horas.
Respecto a las ganancias dijo que cuando le va bien se lleva hasta 500 pesos, aunque eso no es muy seguido, ya que normalmente se lleva 300 o 200 pesos.
"Por la pandemia hubo días que no vendía nada ya que la gente no se le queria acercar a mí".
"Alguna vez sufrí de maltrato por parte de los supervisores, me corrían y no podía vender mis productos".
Comentó que algunas veces las autoridades le cobraban más de lo que ganaba, pero afortunadamente solo pasaba cuando había eventos grandes en el zócalo.