Una reconocida locutora radial de Utah fue asesinada a sangre fría al parecer por el hombre que, durante más de un año, le juró que estaba dispuesto a amarla y protegerla para siempre.
Se trata de Gabriela Sifuentes Castilla, más conocida entre la comunidad hispana de ese estado como ‘Gaby Ramos’.
La mujer de 38 años murió tras recibir varios balazos la madrugada del pasado domingo en su hogar en la ciudad de Taylorsville, de acuerdo con los reportes de las autoridades locales. Ramos era conductora de un programa en la estación Radio de la Nueva Generación/La Mas Picosita (KMRI 1550 AM).
Todo indica que el verdugo fue su pareja
Según los reportes preliminares del Departamento de Policía de Taylorsville todo indica que la persona que le arrebató la vida de una manera tan cobarde y desalmada a la comunicadora fue su propio novio, un tipo que ante la vista de los demás había llegado a amarla como a su propia vida.
Los detectives identificaron al sujeto como Manuel Omar Burciaga Perea, de 34 años, exprometido de la víctima. El sospechoso es prófugo de la justicia y ya se encuentra actualmente entre los más buscados de Utah debido a este crimen que ha conmocionado a toda una comunidad. Se le considera armado y peligroso.
Todo fue porque ella no se puso el anillo de compromiso.
La versión que dieron a las autoridades algunos testigos del crimen fue que la disputa fatal comenzó cuando la locutora regresó a su casa esa noche y el novio comenzó a reprocharle porqué no tenía puesto su anillo de compromiso. Ella le dijo que se le había olvidado, lo cual lo enojó aún más.
El hombre supuestamente se enfureció tanto que le pegó un puñetazo a una de las ventanas de la casa quebrándola en el acto. Gaby tomó entonces su teléfono y llamó al 911 para denunciarlo. Al ver eso, Manuel entró al cuarto, tomó su anillo y se largó de la casa. Gaby le dijo a la operadora que el agresor ya se había marchado.
Unos minutos más tarde, tocaron a la puerta del hogar. Los residentes creían que se trataba de la policía y abrieron sin pensarlo dos veces, pero cuan equivocados estaban. Todo indica que se trataba de Manuel, pero esta vez llevaba un arma en sus manos. Gaby le pidió que por favor se marchara porque la policía ya estaba en camino.
En lugar de acatar sus indicaciones, lo que Manuel hizo fue disparar varias veces en su contra, informaron las fuentes policiales. Inmediatamente abandonó la escena a toda prisa. Todo ocurrió en cuestión de segundos, de acuerdo con lo que Rocío Sifuentes le dijo al noticiero local KSL.com.
Los familiares de la víctima consideran que el plan de Manuel para evadir a la justicia estadounidense por el crimen de Gaby es regresarse a México, pero creen que todavía sigue escondido en algún lugar de Utah a la espera de que “se calmen las aguas”, porque sabe bien que lo andan buscando de manera activa.
Por lo general, el anda en una camioneta Chevy modelo 2000 cama larga y de doble cabina con placas estatales #U405MN. Los allegados de Gaby han abierto una cuenta en GoFundme para poder recoger fondos y enviar el cuerpo a la tierra natal de Gaby donde la esperan sus padres y su pequeña hija de 9 años, para darle cristiana sepultura.
Irónicamente, Gaby fue asesinada en esta fecha cuando en Estados Unidos se celebra el mes en contra de la violencia doméstica. “Ella estaba lidiando con una relación tóxica cuando este cobarde decidió tomar su vida en sus manos. Esto le puede pasar a cualquiera: a tu hija, a tu hermana o a tu mejor amiga”, apunta uno de los párrafos que escribieron en la página para colectar ayuda.
La idea de este mensaje es llamar la atención del público sobre ese enemigo silencioso llamado violencia doméstica del que muchas personas se niegan a aceptar que los asedia. “Todos estamos en shock después de esta confrontación fatal. Si alguien está envuelto en una relación violenta, por favor busque ayuda antes que sea demasiado tarde, hay muchos recursos…”, concluyeron.