Debido a las restricciones a la producción y venta, el consumo de cerveza bajó a 65 litros per cápita, nivel similar al registrado en 2017.
Después de crecimientos constantes durante los últimos años, el paro de las plantas y las restricciones por la pandemia de Covid-19 golpearon la industria de la cerveza en México en 2020.
La producción de la bebida registró una caída de 4.7%, a 118.7 millones de hectolitros, sin embargo, las exportaciones y consumo también se vieron viraron a la baja.
De acuerdo con datos de Cerveceros de México, el de 2020 es el nivel más bajo desde hace 3 años, ya que en 2019 la producción llegó a los 124.5 millones de hectolitros, en 2018 alcanzó los 121.6 millones y en 2017 fue de 112 millones de hectolitros.
En abril de 2020, empresas como Grupo Modelo, Heineken y productores artesanales tuvieron que frenar sus fábricas ante la restricción de actividades ordenada por las autoridades para prevenir contagios de Covid-19, lo que generó escasez en el mercado durante semanas, hasta que reanudaron operaciones en junio.
En entrevista con Forbes México, la directora de Cerveceros de México, Karla Siqueiros, comentó que el haber estado sin actividad 60 días tuvo una repercusión importante en la producción, exportación y balanza comercial.
Reflejo de esto, detalló, es que el superávit comercial fue de 4,645 millones de dólares, 118 millones de dólares menos que el año pasado; mientras que las exportaciones alcanzaron los 37.6 millones de hectolitros, una disminución de 6.2% en relación a 2019.
“Nos dolió mucho haber estado cerrados 2 meses, una vez reactivada la producción de cerveza nos enfrentamos a restricciones a la venta, como leyes secas, restricciones a la distribución, que al final vemos ese impacto reflejados en las cifras de 2020”, afirmó.
La representante de la industria explicó que el 2019 fue un año muy bueno, que traía una tendencia positiva de varios años atrás, mientras que el año pasado fue atípico; sin embargo, en este momento no tienen claro si podrían regresar en 2021 a los niveles de producción previa.
“Nosotros tenemos todo para continuar y seguir con esta tendencia positiva, pero todavía no sabemos qué va a pasar, no está manejada, controlada la pandemia, seguimos con restricciones, mientras no esté funcionando orgánicamente toda la cadena de valor nos va a costar un poco de esfuerzo regresar a lo que estábamos haciendo”, detalló.
Karla Siqueiros comentó que el consumo de cerveza bajó a 65 litros per cápita, nivel similar al registrado en 2017, debido al paro de las plantas, las prohibiciones de comercialización, así como el desabasto.
No obstante, destacó que México sigue siendo el primer país exportador de cerveza en el mundo, además de mantener la cuarta posición como productor, después de Estados Undios, China y Brasil.
De hecho, la semana pasada el CEO de Anheuser Busch-Inbev, dueña de Grupo Modelo, Carlos Brito, señaló que en México su negocio se recuperó rápidamente del cierre de operaciones de dos meses ordenado por el gobierno, con lo que logró generar sólidos resultados en la segunda mitad del año.
“Si nos fijamos en México, a pesar de la segunda ola de la pandemia, estamos en pleno funcionamiento y vemos una buena demanda subyacente”, dijo el directivo de la cervecera en conferencia con analistas.
Mientras que el CEO de Heineken a nivel global, Dolf van den Brink, expuso que sus operaciones en el país estuvieron suspendidas durante la mayor parte del segundo trimestre y reanudaron la capacidad de producción total a fines del tercer trimestre, por lo que se enfocaron en impulsar el valor de sus productos.
A pesar de esto, el sector logró mantener el valor la industria a pesar de la baja en la producción, ya que según la Encuesta Mensual de la Industria Manufacturera del Inegi, el valor aumentó ligeramente 0.1% en 2020 respecto al año anterior, al llegar a los 185.37 mil millones de pesos.