Gerardo de 62 años dejó los estados bancarios donde aseguraba que personal de Banco Azteca le robó un millón 10 mil pesos y afirmaba que por la pandemia no le fue posible llegar ante un juez para denunciar el hecho
Abigail de 31 años de edad, ejecutiva de Banco Azteca, fue detenida junto con Ricardo de 31 años, su pareja, por personal de la Fiscalía general de Justicia del Estado de México, por una investigación por la desaparición de un millón 10 mil pesos de la cuenta de un hombre jubilado, quien ante la impotencia de perder sus ahorros decidió suicidarse.
Gerardo Morfín, de 62 años, al quedarse sin dinero ni para comer, comprar medicinas o poder pagar un médico, decidió ahorcándose en la sala de su casa, donde se colgó con una cadena de la herrería de un domo y su cuerpo fue encontrado el 24 de febrero, en la calle Asunción esquina Granada, en el fraccionamiento Citara.
Junto a su cuerpo, Gerardo dejó los estados bancarios donde aseguraba, personal de Banco Azteca le robaron un millón 10 mil pesos y afirmaba que por la pandemia, no le fue posible llegar ante un juez, para denunciar el hecho.
Un familiar de Gerardo denunció este fraude ante la Fiscalía mexiquense, por lo que fue iniciada una indagatoria, indicaron autoridades.
En la investigación, personal de la FGJEM llevó a cabo una movilización en las inmediaciones de una sucursal de dicha empresa ubicada en la colonia Centro, en el municipio de Huehuetoca, donde fueron detenidos Ricardo y Abigail, quienes tenían en su poder 21 tarjetas de débito propiedad de Banco Azteca, de las cuales ellos no eran los titulares.
Ambas personas fueron presentadas ante el Agente del Ministerio Público, quien inició una carpeta de investigación “por el delito de falsificación y utilización indebida de títulos al portador, documentos relativos al crédito, hipótesis de detentar tarjetas auténticas destinada al pago de servicios sin consentimiento de quien esté facultado”.
En esta indagatoria iniciada tras el suicidio de Gerardo, personal de la Fiscalía mexiquense encontró que en el mes de diciembre del año 2019 la detenida y su pareja sentimental planearon disponer de los fondos de una cuenta de un hombre de 62 años de edad.
Por ello esta mujer citó a la víctima en el banco referido supuestamente para descargarle una aplicación móvil en su teléfono celular, no obstante ésta lo descargó en un teléfono que previamente ella había comprado.
Posteriormente la investigada aperturó una cuenta a nombre de una mujer quien ya había fallecido y el día 29 de diciembre de ese año descargó la aplicación móvil del banco referido en otro teléfono celular de su propiedad”, indicaron autoridades de la FGJEM.
Después, “los días 29 y 30 de diciembre de 2019 la detenida habría realizado traspaso de fondos por las cantidades de 610 mil pesos y 400 mil pesos de la cuenta de la víctima a la cuenta creada por ella a nombre de la mujer fallecida”.
Los días siguientes de esa cuenta creada fueron realizados depósitos a una cuenta cuyo titular es Ricardo, pareja de la empleada bancaria.
Cuando Gerardo se percató que su cuenta de ahorros se encontraba sin fondos, trató de denunciar el hecho y dejó escrito que acudió ante diversas autoridades, quienes no lo atendieron por la pandemia y el 20 de febrero se habría suicidado.
Los detenidos fueron ingresados al Centro Penitenciario y de Reinserción Social de la zona, en donde quedaron a disposición de un juez, quien los vinculó a proceso por el delito de falsificación y utilización indebida de títulos al portador, documentos relativos al crédito, hipótesis de detentar tarjetas auténticas destinada al pago de servicios sin consentimiento de quien esté facultado, por las tarjetas que tenían en su poder al momento de ser asegurados.
Además, el juez de igual forma los vinculó a proceso por falsificación y utilización indebida de títulos al portador, documentos relativos al crédito público y fraude por haber obtenido 1 millón 10 mil pesos de la cuenta de un cliente de este banco, por lo que suman dos procesos legales en su contra.
No obstante a Abigail y a Ricardo, se les debe considerar inocentes hasta que sea dictada una sentencia condenatoria en su contra, puntualizaron autoridades del FGJEM