Pese al riesgo, policía municipal y CEPC buscaron a escurridizo sujeto en la Plaza Bicentenario
Alfredo González
Al interior del llamado "elefante blanco" de Tlaxcala y pese al riesgo que implica, la noche del jueves elementos policiales municipales en coordinación con voluntarios de la Coordinación Estatal de Protección Civil, aplicaron un protocolo de atención en favor de un sujeto de edad mediana; que intentaría quitarse la vida arrojandose al vacio, desde la parte alta del edificio en obra negra.
Fue minutos después de las 20:00 horas del jueves, que el reporte al 911 movilizó a las autoridades en comento, de las que sus elementos se constituyeron e ingresaron a las instalaciones de la Plaza Bicentenario ubicadas en la esquina del Boulevard Guillermo Valle con las calles Justo Sierra y Miguel N. Lira de la ciudad capital, donde -poco antes de caer la noche- un masculino se encontraba en la parte superior de uno de uno de los elementos del inmueble, amagando con suicidarse.
En el sitio exponiendo su propia integridad, los oficiales Palomino, Cuatecontzi y Quiñones junto con Jiménez, Gómez y Flores realizaron recorridos en los distintos niveles de la edificación cuyo espacio sigue pendiente a ser concluida su edificación y utilización; situación por la cuál carente aún de luz artificial y hasta de escaleras, se mantiene tapiado en sus accesos y cerrado al público.
La búsqueda dió sus primeros resultados cuando con intercambios de señales de luz, se comenzó a focalizar la atención en un punto específico donde estaba el hombre que se presumía actuaba bajo los influjos de alguna sustancia, el que desistió de arrojarse al vacío y entro en una dinámica de intentar escabullirse, al grado de que al verse acorralado descendió como araña humana, por la cara sur (de cristal y celosía de acero), en la que al pié de lo que en proyecto serían las fuentes, fue asegurado y entrevistado.
En su versión Juan Carlos -N- de 23 años de edad, descartó pretender quitarse la vida y afirmó que estaba en el edificio inconcluso porque vive allí, asintiendo con la cabeza cuando se le cuestionó de si estaba consciente de que arriesgaba su integridad y la de los representantes de la autoridad que lo buscaron; ante esto fue remitido para la puesta a disposición ante la autoridad, que probablemente le fijará una multa de tipo administrativo por alterar el orden público.
Con supuesta intención de llamar la atención, ya que la coincidencia de los tatuajes que tiene en su cuerpo y cubrebocas del Joker, serían la pauta de su actuar y razones de un análisis más profundo; a quien dió referencia domiciliaria el Boulevard Guillermo Valle, que casualmente coincide con el espacio popularmente conocido desde hace una década como el "elefante blanco".