Al menos cinco menores de edad han sido asesinados de manera violenta en Puebla, durante lo que va de la cuarentena por la pandemia de Covid-19.
Esta es la otra tragedia, los pequeños murieron en sus hogares y en manos de sus familiares o conocidos en los municipios de Vicente Guerrero, San Andrés Cholula, Puebla, Coronango y Tlaxco.
Ante el aumento de los contagios en la entidad, el 17 de marzo algunas escuelas comenzaron a suspender clases presenciales y de manera oficial la Secretaría de Educación Pública (SEP) decretó el 20 de marzo como el inicio del receso escolar (dos semanas antes de Semana Santa) para evitar poner en peligro de contagio a los estudiantes.
La ‘cuarentena’ o aislamiento en casa provocó un aumento del 23.3 por ciento en los casos de violencia familiar durante el mes de marzo, en comparación con febrero en el estado de Puebla, así lo reflejan datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
El mes pasado fueron integradas un promedio de 33 averiguaciones previas diarias por violencia familiar, cuando el mes anterior la media fue de 26.