Este hallazgo podría ayudar a los virólogos a desarrollar una vacuna, pues el objetivo es replicar la respuesta inmunitaria natural del organismo ante los virus
Investigadores en Australia han revelado este martes que, por primera vez, han observado la respuesta inmunitaria del organismo ante el Covid-19, un avance potencialmente determinante para la lucha contra el virus que tiene en alerta a todo el mundo.
En la sangre de una infectada por Covid-19
Los científicos tomaron muestras de sangre de una paciente que se había contagiado con el nuevo coronavirus y había sido hospitalizada con síntomas moderados, esto de acuerdo al artículo publicado en la revista Nature Medicine.
Observamos una respuesta inmunitaria muy robusta que precedió a la recuperación clínica de la paciente”, aseguró la doctora a cargo de la investigaión, Katherine Kedzierska a la AFP.
La especialista del Instituto Peter Doherty de Infecciones e Inmunidad, de la Universidad de Melbourne informó que esta reacción del cuerpo tuvo lugar cuando la portadora del coronavirus todavía estaba visiblemente mal, pero tres días después se curó.
Los investigadores se lanzaron en una carrera contrarreloj para hallar una vacuna contra el nuevo coronavirus, cuyo balance mundial el martes a las 09H00 GMT era de 180 mil contagios confirmados y mas de 7 mil muertes.
Esta investigación supone un paso importante para entender la recuperación frente al COVID-19″, destacó Keszierska.
Esta científica aseguró contar con resultados similares y comprobables de pacientes que también presentan síntomas moderados.
Cuál es la diferencia con las personas (contagiadas) que se mueren?
Kedzierska dijo que estos hallazgos tienen dos aplicaciones prácticas.
La primera es que ayudará a los virólogos a desarrollar una vacuna porque el objetivo de la vacunación es replicar la respuesta inmunitaria natural del organismo a los virus.
El equipo de investigadores identificó cuatro tipos de células inmunitarias en la sangre de la paciente que se recuperó del Covid-19.
De acuerdo con Kedzierska, son células muy similares a las que vemos en pacientes con la gripe. A pesar de que la gripe mata cada año a centenares de miles de personas en el mundo, existe una vacuna ampliamente efectiva contra esta enfermedad.
La segunda aplicación de este estudio consiste en ayudar a las autoridades sanitarias a evaluar mejor qué personas son más vulnerables en futuros brotes.
Estos “marcadores” o distintivos del sistema inmunitario podrían así contribuir a prever con una mayor precisión qué pacientes desarrollarán síntomas moderados y cuáles corren el riesgo de morir.
La mayoría de muertes por el Covid-19 se registran entre personas mayores o con problemas de salud, como enfermedades coronarias y diabetes.
Los niños, en cambio, no parece que presenten síntomas o muy moderados. Kedzierska destacó la necesidad de seguir investigando para encontrar una explicación a esta particularidad, a la vez que subrayó que el sistema inmunitario se debilita con la edad.