Si el agresor material o intelectual tuvo alguna relación con la víctima, las penas serán mayores, señala el dictamen.
El Congreso de Oaxaca aprobó este miércoles 4 de marzo que las agresiones contra mujeres perpetradas con ácido u otras sustancias corrosivas ya son consideradas un delito, esto gracias a una serie de modificaciones al Código Penal de la entidad.
Estas agresiones serán investigadas bajo el delito de alteraciones a la salud por razón de género, el cual infringe el derecho a una vida libre de violencia, detalló la diputada local por Morena, Elisa Zepeda Lagunas, impulsora de las reformas.
Este dictamen fue aprobado en el contexto de la investigación por el caso de la saxofonista oaxaqueña María Elena Ríos, quien en septiembre de 2019 fue agredida con ácido en el rostro a manos de un hombre presuntamente enviado por su expareja, el priista Juan Antonio Vera Carrizal, quien está prófugo.
Agresiones amerita prisión
El dictamen sometido a votación este día ante el Congreso de Oaxaca establece que el o los autores tanto materiales como intelectuales de una agresión con ácido o sustancias corrosivas contra una mujer recibirán hasta 30 años de prisión.
Asimismo, se detalla que si entre la víctima y el agresor existe o existió una relación de parentesco, afinidad, matrimonio o concubinato, la pena será de 30 a 40 años de cárcel.
Pero, si el ataque causa destrucción de alguna función orgánica, daño permanente o deformidad incorregible en el rostro de la víctima, la sentencia aumentará hasta en dos tercios de la máxima.
Y, por último, estas modificaciones penales contemplan que además del delito de alteraciones a la salud por razón de género, se podrán agregar penas por otros ilícitos que se lleguen a configurar.