El constante paso de vehículos particulares y de tránsito pesado causa embotellamientos en la zona
Alfredo González
Debido al incremento y constante flujo vehicular que concurre en el municipio de Apetatitlán, el crucero carretero de Melchor Ocampo en el municipio de Apetatitlán ya es insuficiente para contener los automóviles procedentes de Contla, Amaxac, Santa Cruz Tlaxcala y Chiautempan, lo que causa severos cuellos de botella diariamente.
La situación se agrava a las horas pico, es decir, temprano por la mañana y después de mediodía por la entrada y salida estudiantes de las instituciones educativas, así como por la tarde noche por el mismo motivo y el retorno de trabajadores de los centros fabriles cercanos.
El punto de conflicto vial es justo donde convergen los accesos a la cabecera municipal de San Pablo, el acceso a Contla de Juan Cuamatzi y la empresa Providencia, así como la carretera estatal hacia Amaxac y Santa Cruz, a la altura del área natural Las Cuevas, el Archivo Histórico del Estado y la sede Tlaxcala del Instituto Politécnico Nacional.
Si bien el flujo vehicular ha aumentado desde hace un año por ser una vía alterna por los trabajos de modernización de la carretera Tlaxcala – Apizaco, de por sí la circulación siempre ha sido constante y con el crecimiento del uso de autos motores es evidente el conflicto de tránsito que ahí se genera.
Aunado a ello, camiones pesados también circulan por esa área de manera forzosa, precisamente porque tienen que llegar a las fábricas textiles existentes en el área.
Si bien la capacidad de la esa carretera en el tramo de Melchor Ocampo ya es exigua, también es escaso el espacio para proyectar algún tipo de distribuidor que eficiente la circulación de los coches, de tal manera que de momento se debe apelar a la cultura vial de conductores particulares, del transporte colectivo, camioneros y del apoyo que autoridades de tránsito puedan brindar.