De los 80 docentes cesados por oponerse a la reforma educativa, hay disposición de la uset por dar atención a los casos
Alfredo González
El 95 por ciento de los 80 trabajadores magisteriales que en un primer paquete ya fueron reinstalados en el Estado, llegaron a sus centros de trabajo originales de donde fueron cesados hace más de tres años por oponerse a la reforma educativa que se instauró hace algunos años, mientras, el cinco por ciento restante pidió cambio voluntario, debido a que en sus escuelas no había las condiciones para volver a trabajar.
Esto, lo anuncio Citlalli Ortiz Cano, integrante del Movimiento Magisterial Tlaxcalteca y que apenas el martes firmó su convenio de órdenes de adscripción y sus salarios caídos ante la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, como maestra cesada por temas políticos. En rueda de prensa, celebró la disposición de las autoridades educativas locales para revisar el resto de casos que están pendientes.
Mencionó que solo en una escuela de Cuauhtenco, del municipio de Contla, se registró un conflicto, en el sentido de que el educador cesado fue suplido por un interino al que luego se le otorgó base, pero ahora ambas personas se mantienen trabajando ahí.
Dio a conocer que en un segundo paquete están inscritas otras tres docentes que esperan sus readscripciones, en tanto que en un tercero se calcula que entrarán entre 15 y 20 maestros más.
“De los 80 del primer paquete, 60 fueron representados por el Movimiento Magisterial Tlaxcalteca, ocho por el Consejo Central de Lucha y cuatro por el Movimiento Combativo de Tlaxcala. El segundo paquete está cerrado con tres más y en un tercer paquete con los rezagados se presume que son unos 108 expedientes de demandas laborales, pero es posible que se integren de 15 a 20 maestros”, indicó.
En ese tenor, Ortiz Cano explicó que se encuentra instalada una Mesa de Incidencias en la Secretaría de Educación Pública del Estado en la que se revisan casos de maestros despedidos injustificadamente, otros por diferentes circunstancias y de normalistas con derecho a plazas, pero hay disposición de la SEPE para revisar cada uno.
Por último, precisó que el pago de salarios caídos a cada docente reinstalado fue proveniente de una bolsa federal, por lo que no se causó daños a las arcas estatales. De paso, dijo que los movimientos magisteriales adheridos a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, darán la lucha en las leyes secundarias de la Ley de Educación federal, para que se les reconozcan derechos que les han sido “ninguneados”.